LINGERIE
Me gusta hablar claro y directo. Ya tengo 30, por lo que puedo saber lo que esta bien o mal, y puedo conocer mis propios gustos, sin necesidad de sentir pudor, temor o vergüenza por ellos. Como la gran mayoria de los hombres, me gustan las mujeres, en especial aquellas que son femeninas, interesantes y sobretodo las que usan lenceria erotica. Me parece que una lenceria erotica no solo estimula amorosa y sexualmente, sino que tambien hace que la mujer se vea mas hermosa. Muchos hombres hemos soñado con aquella profesora o secretaria de falda ajustada, de camisa fina y de ropa interior pequeña y sensual, acompañada de medias ligas y zapatos con tacos. O con aquella enfermera vestida con delantal y debajo de su uniforme, con un body o corses de encaje blanco.
Personalmente me encanta el color negro. Pienso que es mas erotico, y hace que me excite mas. Aunque hay otros colores que tambien me llevan a un placer maximo. Un blanco seductor de encaje. Un rojo intenso tipo bermellon. Un celeste atractivo y jovial. Un lila, el que conquiste seductoramente mis deseos. Un verde, muestra de distincion y frescura. En cuanto a ropas, lo comun es que a la mayoria nos guste aquellas tangas colaless bien pequeñas, las cuales hacen que las mujeres que las usan se les vea su parte posterior bastante atractiva, aunque una pantaleta de encaje o un calzon de microfibra tambien me parecen seductores. Ademas me atraen aquellos bodys finos y delgados, un babydoll equeño y sugerente, y como no, el tipico corses, el que mezcla elegancia con un placer intenso.
Contrariamente a lo que piensen las mujeres, a los hombres tambien nos importa la ropa interior femenina y creo que por una falta de sensualidad propia del hombre chileno o por la idiosincrasia tipica de los “machos” de este pais, muchos no se atreven a hablar sobre lenceria. No es mi caso, ya que no solo me atrevo a hablar sino tambien a regalar cuando la oportunidad lo amerita. Mal que mal, el placer no es solo para nuestra pareja, sino tambien para nosotros mismos.
Contrariamente a lo que piensen las mujeres, a los hombres tambien nos importa la ropa interior femenina y creo que por una falta de sensualidad propia del hombre chileno o por la idiosincrasia tipica de los “machos” de este pais, muchos no se atreven a hablar sobre lenceria. No es mi caso, ya que no solo me atrevo a hablar sino tambien a regalar cuando la oportunidad lo amerita. Mal que mal, el placer no es solo para nuestra pareja, sino tambien para nosotros mismos.
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